domingo, 3 de febrero de 2013

Descubrir...

A la mañana siguiente ella seguía soñando con lo soñado, no era solamente un hecho..., era algo más...., una necesidad.... Simplemente era algo vital y necesario en su vida, como cuando codiciaba un delicioso y apetitoso regaliz de fresa para dejar de pensar en ello... Aún sonriendo constantemente la tristeza por desear lo soñado la hacía sentir pequeñita, pero ella volvía una y otra vez a crecer cada anochecer para envolverse de nuevo en sus sueños y liberarse de su timidez...Así fué durante mucho tiempo hasta que un día gritó para salir de su retraimiento y entonces se paró su reloj, caminó hacia su objetivo y lo alcanzó simplemente sin más...Así fué como se descubrió a si misma....

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